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TERRIZAJE EN LA EMPRESA: LA IMPORTANCIA DEL ONBOARDING DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA ORGANIZACIÓN

por | 14 Ago, 2024 | 0 Comentarios

Recursos Humanos no debería lavarse las manos con la selección del candidato ideal para el puesto de trabajo; una vez que se recluta a los colaboradores, llega el momento de facilitar su integración: el onboarding.

El onboarding es un proceso que busca acelerar la incorporación del capital humano a la empresa, centrándose en la orientación de los nuevos empleados con el fin de ayudarles a adaptarse y adentrarlos al 100% a la cultura empresarial, lo cuál les permitirá:

● desempeñar de forma adecuada su tarea dentro del puesto
● lograr que se sienta valorado entre sus compañeros y por la empresa

Un buen programa de integración, ayuda a los nuevos empleados a sentirse bienvenidos en el trabajo y minimiza el tiempo que tardan las contrataciones recientes en volverse productivas en sus puestos.
El objetivo final es lograr mejores tasas de retención, lo que limita los costos y la molestia de una alta rotación.

Este proceso es a mediano o largo plazo, es decir, no pretende monitorizar las acciones de los nuevos integrantes durante solo una semana: de hecho, es una estructura de acompañamiento que puede durar hasta un año. Abarca desde enseñarles cómo funciona el negocio hasta garantizar que se sientan cómodos y vean oportunidades de desarrollo dentro de la organización.

Algunas cifras:
– el 50% de los empleados con un mal plan de acogida, abandona la empresa antes de los 3 años
– un 88% de las personas cree no haber experimentado un plan de onboarding efectivo
– el 90% de los trabajadores decide si permanecerá en una empresa durante los primeros seis meses, subrayando la importancia de un buen onboarding
– 1 de cada 3 personas deja su empleo si el primer día no ha tenido un buen recibimiento
– el 77% de las personas que reciben un onboarding de calidad superan los objetivos acordados durante sus primeras semanas.

Algunas ventajas evidenciadas
– sensación de satisfacción personal
– alto nivel de compromiso
– desarrollo de un sentido de pertenencia
– mejor desempeño en su futuro rol
– mayor productividad

Un buen “onboarding” es amor a primera vista entre empleado contratado y empresa. Un mal “onboarding” es desamor a primera vista.

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